Del recuerdo

Se manifiesta temprano en la mañana ,
Con descomunales e impacientes miradas
Apareciendo un túmulo en sus pestañas
Y debajo de sus lágrimas, que caen al suelo como pequeñas cascadas…

¿De quién pudieran ser aquellos colores de tonalidad indefinida?
¿A dónde llegará aquel ímpetu de sentirse invadida?

Sus ojos, como dos estrellas en equilibrio
Tan definidos como una tarde que escampa tras horas eternas
Y sus manos, oh! sus manos,
fragancias manipuladoras en abundancia.
Cuanta belleza perdida en el desierto de mis pupilas,
Cuan danza libre del deseo inoportuno para cierta vagancia…

Porque se asoma el sol de noche en mi cuarto?
De donde vienen los gritos de los niños extraviados?

Por mi causa quizá, no estas mas que en un cuento de Tolkien.
Asomada en una ventana distante,
gritando a lo que fuimos y a lo que no será.
Clamando y llorando a todo lo que parezca irradiante.

Pero mas bien, son tus alas que se confunden con las sábanas.
Y eres tu…conjugada
La mirada que me hacen delirar, y mirar el reloj.
La distancia inalcanzable entre la luna y el mar…


Mírame tanteando soledad y tristeza debajo de tu respiración,
sintiendo por un segundo el tumulto debajo de ti,
corrompiendo el viento que baja por tu espalda
y que me toca, y se desliza suavemente entre mis dedos…
Mírame evitado en aquella conversación…



y veo tanto temor en mi sudor, el miedo que he sentido
desde aquella mirada lejana que ha venido a parar
después de tantos sollozos al pie de tu cama.
La veo tan clara, que podría levantarte e invitarte a tocarla.

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